Cómo frenar el envejecimiento y parecer más joven.

Esto que voy a decir, no me gusta.

No soy de hablar sobre mi, pero viene al caso de lo que os quiero contar hoy.

Y puede que algunos os veáis reflejados.

Y los que no, este mail es para vosotros, ya que es el momento de empezar a ponerle remedio.

En X muchas veces, me dicen que no se creen que tenga casi 49 años.

Ven la imagen del tweet fijado en mi perfil y me dicen… “claro claro… serán 39…” 

También hacen otro tipo de comentarios cuando subo alguna imagen andando o entrenando y las respuestas me hacen reír mucho… :)

Porque sí, tengo 48 y cumplo 49 en septiembre..
Y sí, me cuido. Bastante.
No por estética (aunque también).

Sino porque la edad que aparentas dice mucho de tu salud real.

Y esto no lo digo yo.

Sino un estudio que tiene 45 años de antigüedad y que encontró algo curioso:


La edad de tu cara refleja tu edad biológica.

En la imagen que mostraban había dos personas de 45 años “en el DNI”…
Pero biológicamente estaban a años luz.


¿Consecuencias? Más deterioro cognitivo, más riesgo de obesidad, enfermedades cardiovasculares, renales…


Todo por envejecer antes de tiempo.

¿Por qué unos con 50 parecen de 40… y otros de 40 ya parecen de 60?

Por esto.

Aquí tienes todo lo que acelera el envejecimiento.
Y lo que puedes hacer para verte y sentirte más joven desde ya.

1. Lo que crees de ti, lo reflejas

Hay algo que mucha gente no entiende:
cómo piensas sobre tu edad influye en cómo envejeces.

Si repites frases como:

  • “Estoy mayor para esto”

  • “Tengo rodillas de viejo”

  • “A partir de los 40 todo va cuesta abajo”

…estás cocinando tu mente a fuego lento para que se lo crea y acabe así….
como una profecía autocumplida.

Porque la mente no distingue lo que crees de lo que es real.

  • Pregunta rápida:
    ¿Lo que piensas sobre tu edad te ayuda… o te hunde?
    Si es lo segundo, empieza por ahí.

2. Tus hábitos dictan tu ritmo de envejecimiento

Lo que repites cada día = tu vida.
Así de simple.

Un 40% de lo que haces hoy lo repetirás mañana. Y pasado. Y el siguiente.

Cambiar hábitos cambia tu cuerpo y tu mente.
Y sí, también tu edad biológica.

Ejemplo real de “Hábitos Atómicos” (James Clear):

James Clear cuenta el caso de un hombre que perdió más de 45 kg simplemente cambiando su entorno y su identidad.

Primero no se obsesionó con el resultado.
Solo con un hábito: “No puedo perder ningún entrenamiento.”

Iba al gimnasio todos los días…
pero al principio solo durante 5 minutos.
Entraba, hacía algo simple, y se iba.
Su única prioridad era crear la identidad de alguien que no fallaba.

Ese pequeño compromiso diario se consolidó.
Y el resto cambió solo:
la alimentación, el esfuerzo, la constancia.

Cambió su identidad. Y eso cambió su cuerpo.

Yo uso una pregunta parecida con mis clientes (y conmigo):

Hazte esa pregunta.
Y luego haz esto:

  1. Elige 2 hábitos que te están frenando.

  2. Ataca 1 de ellos → identifica la señal, la rutina, la recompensa.

  3. Sustitúyelo. Y repite.

Algunas ideas que funcionan:

  • Pasar de 12h a 8h de ventana de comida.

  • Batido de proteína por la mañana.

  • Entrenar nada más levantarte.

  • Llevar un diario de lo que comes.

No necesitas cambiarlos todos. Solo uno.
Y dejar que el impulso arrastre al resto.

3. Mejora tu composición corporal (sí, también eso)

No hablo solo de perder grasa.
Hablo de tu relación músculo-grasa.

Quieres tener un nivel de grasa sano.
Y músculo suficiente para sostener tu vida con energía.

🔹 Nutrición: lo que comes cambia tu biología

Tu dieta puede alterar la expresión de tus genes y cómo envejece tu cerebro.

¿Qué necesitas?

  • Grasas saludables: omega 3 de aguacate, nueces, pescados.

  • Proteína: 1.5 a 2gr día por Kg de peso corporal. Clave para músculo y hormonas.

  • Fibra: regula el intestino y el azúcar en sangre.

  • Verduras y frutas coloridas: antioxidantes y antiinflamatorios.

Y aunque suene impopular:.
He visto que quienes mantienen un ligero déficit calórico constante envejecen mejor.
No hay pruebas definitivas, pero mi experiencia es clara tras miles de clientes.

🔹Músculo: tu seguro anti-vejez

La pérdida de fuerza es una de las señales más claras de envejecimiento biológico.
Y empieza pronto: 3–5% menos por década.
Y se dispara después de los 60.

Pero la buena noticia es que puedes revertirlo a cualquier edad.

¿Cómo?

  • Entrena fuerza 3 veces por semana.

  • Hazlo con buena técnica+ sobrecarga progresiva.

  • Evalúa tu fuerza cada 6 meses.

En nuestros programas lo tenemos claro: sin músculo, no hay longevidad.

4. El sueño es tu limpiador celular.

Dormir no es opcional.
Es tu sistema de mantenimiento.

Mientras duermes:

  • Se eliminan toxinas.

  • Se reparan células.

  • Se regulan hormonas.

  • Se recupera el cerebro.

Un mal sueño envejece.
Uno bueno, rejuvenece.

5. Otras herramientas que puedes sumar

  • Analíticas cada 4–6 meses: revisa inflamación, lípidos, insulina, etc.

  • Hidratación adecuada: ayuda a mantener tu piel más joven.

  • Sauna infrarroja: activa proteínas que reparan células → mejora función cardiovascular, reduce inflamación.

  • Test genéticos: pueden darte pistas de cómo envejece tu cuerpo y qué necesita.

Cierre

Envejecer es inevitable.
Pero cómo envejeces sí está en tus manos.

Cuando alguien empieza a cuidar su mente, sus hábitos y su cuerpo…
Lo ves en su cara. En su energía. En sus ganas. SE NOTA.

No hace falta hacer todo.
Solo empezar.

Da el primer paso.
Hazlo simple. Hazlo hoy.
Y en unos meses… igual no te reconoces en el espejo.

Un abrazo,

Hugo - NOgymNOlimits